La obsesión de una madre de Utah con el protector solar no previno el cáncer de piel

Una pequeña mancha seca en la nariz de una madre de Utah, inicialmente descartada como piel invernal, fue diagnosticada como carcinoma basocelular. Amanda Anderson, de 43 años, quedó conmocionada por el diagnóstico a pesar de estar "obsesionada" con la crema solar. Después de que un tratamiento inicial falló, una biopsia confirmó el cáncer, lo que llevó a una cirugía especializada de Mohs.

El procedimiento implicó la eliminación de capas finas de piel hasta que no quedó cáncer, dejando un agujero del tamaño de un centavo que requirió cirugía reconstructiva. Amanda reflexionó sobre crecer en el soleado Arizona durante una época en la que broncearse estaba de moda y el protector solar no se usaba ampliamente, destacando que el daño solar a menudo se produce en la juventud.

Ahora recuperada, es una defensora vocal de la protección de la piel, instando a los padres a inculcar hábitos saludables en sus hijos. Enfatiza que el cáncer de piel es altamente prevenible y tratable si se detecta a tiempo, animando a todos a tomar en serio cualquier cambio inusual en la piel.

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